Trabajar la plata es un proceso complicado que lleva siglos mejorándose y reinterpretándose. Por este motivo, se utilizan nomenclaturas que nos ayudan a conocer ante qué material estamos. La Plata 925 es uno de estos símbolos que los artesanos utilizan para determinar el grado de pureza incluido en una pieza. Descubre, a continuación, los secretos sobre este material y su magnitud en las piezas que adquirimos como por ejemplo los anillos de plata o las pulseras de plata.

Plata 925: La más usada entre artesanos y joyeros

La plata es un material bastante maleable, es decir, blando. Por esta razón, para realizar objetos de joyería como colgantes de plata, los artesanos han tenido que realizar aleación con otros materiales. Solo de esta forma es posible conseguir piezas resistentes y adecuadas para el uso. Es, por tanto, casi imposible que nos encontremos con una pieza 100% de plata o, como corresponde a su unidad de medida, 1000 milésimas. Lo más común es que en el mercado obtengamos objetos de plata 950, 925, 900 y 800.

Es de esta forma como llegamos a la famosa Plata 925. Una pieza compuesta por 925 milésimas de plata, o un porcentaje de 92,5% de plata pura, y 75 milésimas de cobre, o 7,5% de cobre expresado en tanto por ciento, será un objeto de Plata de ley 925. Los objetos de Plata 925 están considerados como plata de primera ley. Su calidad y sus características se encuentran entre las mejores que podemos encontrar en el mercado.

Diferenciar la plata 925

La plata es un material que puede ser falsificado fácilmente. A ojos de alguien inexperto, la cantidad de plata que contenga un objeto puede ser modificada sin mucho esfuerzo. Es por ello que para conocer con exactitud qué tipo de elemento tenemos ante nosotros, es recomendable seguir algunos consejos que nos ayuden a descubrir si es realmente Plata 925.

Así, en primer lugar y de forma sencilla, podemos comprobar si en la pieza, como pendientes de plata, existe alguna marca con dicho número. Los artesanos y los joyeros que respetan su trabajo y lo hacen de forma correcta suelen marcar con un pequeño punzón su trabajo para que quede constancia de que nos encontramos ante algo auténtico y no una mera imitación. Sin embargo, esto no es siempre fácilmente reconocible.

Una acción que no dejará indiferente a nadie pero que nos da una auténtica respuesta sobre si nos encontramos ante Plata 925 es oler el objeto. La Plata 925 no huele, por tanto, si puedes percibir el olor a cobre u otro metal, la cantidad de plata de esa pieza será inferior al comentado 92,5%.

Para no tener ningún tipo de duda ni problema adquiere siempre tus joyas en un vendedor de confianza. Esta acción que parece obvia no es siempre la máxima de muchos compradores y después, puede haber grandes problemas. Nada nos puede dar mayor seguridad para adquirir Plata 925 que un vendedor que conocemos.

El precio es un gran indicador de que nos encontramos ante Plata 925. Los chollos no existen y si encontramos un precio que parece una ganga, ¡desconfía! La plata 925 es imposible encontrarla por debajo de los 10€.

Por último, si vamos a adquirir algo de segunda mano, la pátina nos ayudará a comprobar que el objeto es auténtico. La Plata 925 se debilita y oscurece con el tiempo, deja de brillar. Si la pieza que tienes entre tus manos tiene estas características, entonces tiene la cantidad de plata adecuada para considerarse de primera ley.

¿Qué es oro de 18 quilates? ¿Qué es oro de 24 quilates? ¿Qué es plata 720? ¿Qué es plata 925?
¿Qué es plata 950? ¿Qué es plata 999? ¿Qué es plata pura? ¿Qué es plata oxidada?